Habitar el Cuerpo para Conquistar la Paz Interior
16.01.2015 09:58
13/01/15
Habitar el Cuerpo
para Conquistar la Paz Interior
"Mother”, by Elizabeth Barnett
Durante la mayor parte de nuestra vida no estamos realmente donde está nuestro cuerpo. Suena el despertador y el cuerpo se mueve hacia una habitación o hacia otra, las manos toman lo necesario para el desayuno, las piernas nos conducen a la ducha, los ojos a la ropa con la que nos vestimos y los órganos internos saben perfectamente lo que necesitan hacer....Así, durante todo el día, muchas semanas, meses y años...¿Dónde está nuestra atención en todo este devenir? ¿Dónde estás TÚ mientras tu cuerpo vive por su cuenta? ¿Cuál es realmente tu vida, la que experimenta tu cuerpo o la de tu mente?
Esto quiere decir que la mente y la dimensión de los pensamientos (a los que les encanta viajar y divagar de un lado a otro) dominan casi toda nuestra existencia y cada una de nuestras experiencias. Incluso cuando estamos sentados en una terracita con amigos para conversar, nuestra atención muchas veces no está dirigida a lo que nos está contando el otro, sino elucubrando nuestra próxima intervención en la conversación.
Nuestro ego, identificado con nuestra mente, siempre quiere ser el protagonista. Así, no es de extrañar que se nos caigan cosas de las manos, que olvidemos coger las llaves del coche o que nos tropecemos a menudo al andar, entre otras muchísimas acciones que nuestro cuerpo hace pero que nuestra mente no recuerda bien, por estar ausente creyendo estar presente... Como señala Eckhart Tolle en su maravillosa "conferencia" en Barcelona (aquí la podrás disfrutar): "¿Dónde estás? ¿Estás aquí completamente? ¿Estás aquí como totalidad? (no solamente con la cabeza y los pensamientos, sino con la totalidad del Ser, que incluye el cuerpo interior) ¿Puedes percibir que estás sentado y a la vez sentir que tu cuerpo está vivo?"
Sólo cuando el cuerpo se queja de achaques o dolores (como queriendo decir de una vez por todas ¡Que estoy aquí! ¡Nunca me haces caso!) es cuando le comenzamos a atender, extrañados de su "repentina reacción", y descubrimos que tenemos un hígado al que hay que cuidar, una garganta que debemos proteger, una piel que debemos hidratar y dar caricias de vez en cuando...
Aunque no soy ninguna experta en meditación, llevo varios años interesándome por las prácticas meditativas y poniendo en práctica algunas de ellas. Todas tienen en común que buscan ser capaces de observar el devenir de los pensamientos, calmar su ritmo incesante para, en definitiva, desarrollar más paz interior. No obstante, para mí meditar va mucho más allá que irse a un lugar tranquilo y sentarse con los ojos cerrados en postura de loto. Aunque éso también puede formar parte de tu camino hacia la conquista de la paz interior, el Mindfulness, o "consciencia plena" se puede desarrollar ya, ahora mismo, desde esta posición en la que te encuentras leyendo.
¿Te tropiezas a menudo al andar?
¿Se te suelen resbalar las cosas de las manos y se te caen al suelo?
¿Muchas veces te das en la cabeza con la esquina de algún mueble porque no controlaste la distancia?
¿Al poner la mesa se te ha roto algún plato o vaso?
¿Al servir el té o la sopa casi siempre se derrama algo de líquido por fuera?
¿Eres de los que se consideran olvidadizos pues cuando ya estás en la calle tienes que volver atrás para coger algo que se ha olvidado?
¿Te acuerdas de lo que comiste ayer?
¿Qué ropa llevabas ayer? ¿Cuál llevas puesta ahora, mientras lees esto? (no vale mirar hacia abajo)
¿Sabrías describir, paso a paso, lo que hiciste durante el día de ayer?
¿Se te suelen resbalar las cosas de las manos y se te caen al suelo?
¿Muchas veces te das en la cabeza con la esquina de algún mueble porque no controlaste la distancia?
¿Al poner la mesa se te ha roto algún plato o vaso?
¿Al servir el té o la sopa casi siempre se derrama algo de líquido por fuera?
¿Eres de los que se consideran olvidadizos pues cuando ya estás en la calle tienes que volver atrás para coger algo que se ha olvidado?
¿Te acuerdas de lo que comiste ayer?
¿Qué ropa llevabas ayer? ¿Cuál llevas puesta ahora, mientras lees esto? (no vale mirar hacia abajo)
¿Sabrías describir, paso a paso, lo que hiciste durante el día de ayer?
Durante la mayor parte de nuestra vida no estamos realmente donde está nuestro cuerpo. Suena el despertador y el cuerpo se mueve hacia una habitación o hacia otra, las manos toman lo necesario para el desayuno, las piernas nos conducen a la ducha, los ojos a la ropa con la que nos vestimos y los órganos internos saben perfectamente lo que necesitan hacer....Así, durante todo el día, muchas semanas, meses y años...¿Dónde está nuestra atención en todo este devenir? ¿Dónde estás TÚ mientras tu cuerpo vive por su cuenta? ¿Cuál es realmente tu vida, la que experimenta tu cuerpo o la de tu mente?
Esto quiere decir que la mente y la dimensión de los pensamientos (a los que les encanta viajar y divagar de un lado a otro) dominan casi toda nuestra existencia y cada una de nuestras experiencias. Incluso cuando estamos sentados en una terracita con amigos para conversar, nuestra atención muchas veces no está dirigida a lo que nos está contando el otro, sino elucubrando nuestra próxima intervención en la conversación.
Nuestro ego, identificado con nuestra mente, siempre quiere ser el protagonista. Así, no es de extrañar que se nos caigan cosas de las manos, que olvidemos coger las llaves del coche o que nos tropecemos a menudo al andar, entre otras muchísimas acciones que nuestro cuerpo hace pero que nuestra mente no recuerda bien, por estar ausente creyendo estar presente... Como señala Eckhart Tolle en su maravillosa "conferencia" en Barcelona (aquí la podrás disfrutar): "¿Dónde estás? ¿Estás aquí completamente? ¿Estás aquí como totalidad? (no solamente con la cabeza y los pensamientos, sino con la totalidad del Ser, que incluye el cuerpo interior) ¿Puedes percibir que estás sentado y a la vez sentir que tu cuerpo está vivo?"
Sólo cuando el cuerpo se queja de achaques o dolores (como queriendo decir de una vez por todas ¡Que estoy aquí! ¡Nunca me haces caso!) es cuando le comenzamos a atender, extrañados de su "repentina reacción", y descubrimos que tenemos un hígado al que hay que cuidar, una garganta que debemos proteger, una piel que debemos hidratar y dar caricias de vez en cuando...
Aunque no soy ninguna experta en meditación, llevo varios años interesándome por las prácticas meditativas y poniendo en práctica algunas de ellas. Todas tienen en común que buscan ser capaces de observar el devenir de los pensamientos, calmar su ritmo incesante para, en definitiva, desarrollar más paz interior. No obstante, para mí meditar va mucho más allá que irse a un lugar tranquilo y sentarse con los ojos cerrados en postura de loto. Aunque éso también puede formar parte de tu camino hacia la conquista de la paz interior, el Mindfulness, o "consciencia plena" se puede desarrollar ya, ahora mismo, desde esta posición en la que te encuentras leyendo.
¿Cómo? Habitando tu cuerpo.
¿Y cómo habito mi cuerpo?
Respondiendo internamente y desde el disfrute perceptivo más absoluto a las siguientes preguntas:
¿Y cómo habito mi cuerpo?
Respondiendo internamente y desde el disfrute perceptivo más absoluto a las siguientes preguntas:
¿Dónde estoy realmente? ¿Dónde está volcada mi atención en este instante?
¿Dónde están mis pies? ¿Siento las plantas bien apoyadas?
¿Cómo tengo la espalda? ¿Hay algún apoyo detrás?
¿Qué estoy haciendo con las manos? ¿Soy capaz de sentir toda la palma? ¿Su temperatura? ¿La textura de lo que estoy tocando?
¿Cómo tengo la boca? ¿La tengo húmeda o seca?
¿Qué sucede si genero un poquito de saliva en la boca, en los labios?
¿Tengo el pecho comprimido o abierto?
¿Me estoy dando cuenta de mi respiración?
¿De qué forma estoy respirando?
¿Hay algún sabor en mi lengua, en mis dientes?
¿Qué sonidos soy capaz de percibir en este instante (desde los más lejanos a los más cercanos)?
¿Cómo es el lugar donde me encuentro? ¿Es amplio, frío, templado, oscuro...? ¿Hace calor, siento frío? ¿Hay alguna ventana? ¿Qué puedo ver a través de ella? ¿Qué colores y formas predominan a mi alrededor (enfrente, detrás, a los lados)?
¿Hay algún ser vivo a mi alrededor?
¿Cómo tengo el gesto, el rostro?
¿De qué manera puedo extrapolar esta consciencia del instante presente a cualquier otro instante de mi vida?
¡Esto es meditar!
FELIZ AÑO 2015
...
Estas Navidades...
¿Dónde están mis pies? ¿Siento las plantas bien apoyadas?
¿Cómo tengo la espalda? ¿Hay algún apoyo detrás?
¿Qué estoy haciendo con las manos? ¿Soy capaz de sentir toda la palma? ¿Su temperatura? ¿La textura de lo que estoy tocando?
¿Cómo tengo la boca? ¿La tengo húmeda o seca?
¿Qué sucede si genero un poquito de saliva en la boca, en los labios?
¿Tengo el pecho comprimido o abierto?
¿Me estoy dando cuenta de mi respiración?
¿De qué forma estoy respirando?
¿Hay algún sabor en mi lengua, en mis dientes?
¿Qué sonidos soy capaz de percibir en este instante (desde los más lejanos a los más cercanos)?
¿Cómo es el lugar donde me encuentro? ¿Es amplio, frío, templado, oscuro...? ¿Hace calor, siento frío? ¿Hay alguna ventana? ¿Qué puedo ver a través de ella? ¿Qué colores y formas predominan a mi alrededor (enfrente, detrás, a los lados)?
¿Hay algún ser vivo a mi alrededor?
¿Cómo tengo el gesto, el rostro?
¿De qué manera puedo extrapolar esta consciencia del instante presente a cualquier otro instante de mi vida?
¡Esto es meditar!
FELIZ AÑO 2015
...
Estas Navidades...
¡REGALA BIENESTAR!
Regala un Bono de sesiones de
YOGA y CONSCIENCIA CORPORAL 2015
para un ser querido.
¡Tú eliges cuántas y a quién, y yo personalizo una tarjeta a tu gusto!
El Árbol Despierto
* Válido hasta el 31 de enero 2015 en Los Arroyos (El Escorial)
...
El Árbol Despierto
* Válido hasta el 31 de enero 2015 en Los Arroyos (El Escorial)
...
¿Quieres recibir periódicamente novedades, herramientas e ideas útiles para ayudar a otros y a ti mismo a crecer día a día?
HAZ CLICK AQUÍ
...
 |
YOGA y CONCIENCIA CORPORAL
"Desarrolla la sensación de unidad habitando tu casa: tu propio cuerpo"
- EN MI ESPACIO (Individual o parejas)
- A DOMICILIO (en Los Arroyos, Madrid)
"Yoga Pose and Frog Prince", by Marylu Downing